Pastor había entrado en la casa para mover la heladera.

 

Un pastor y su hija se encuentran entre las víctimas de las fuertes lluvias en Pernambuco durante el fin de semana, cuando los deslizamientos de tierra mataron a muchas personas.

El pastor Ezequias Oliveira y su hija, Luana Beatriz Oliveira, de 19 años, estaban dentro de su casa en Jardim Monte Verde, en el límite entre Recife y Jaboatão, cuando ocurrió el deslizamiento de tierra.

“Ella y su papá entraron a la casa a sacar una heladera del lugar, para que no se estropeara por la lluvia. La barrera se resbaló cuando estaban moviendo el refrigerador”, dijo su hijo, Elvis Drummond, a g1.

Según Elvis, se mudó hace dos años, pero nació y creció en Monte Verde,

“Me mudé allí hace dos años, pero nací y crecí en Monte Verde. Desde las 9 am, la gente ha estado aquí en el IML tratando de liberar los cuerpos. Es un caos, mucha burocracia, la gente está aquí desde el viernes”, dijo.

Al menos 93 personas han muerto por las lluvias en Pernambuco, mientras el gobierno estatal continúa la búsqueda de 24 personas desaparecidas.

El presidente de la República, Jair Bolsonaro (PL), sobrevoló las zonas afectadas y ofreció su solidaridad con los familiares de las víctimas.

“Todos estamos tristes. Expresamos nuestras condolencias a la familia. Nuestro principal objetivo es consolar a la familia y, a través de los medios materiales, servir también a la población”, dijo el mandatario.

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